Desde el 31 de enero del 2010, Tepic es otro; los niveles de violencia se han incrementado casi de manera exponencial. Dicen las autoridades estatales y municipales que son hechos aislados, pero lo más grave es que quien fue presidente municipal de Tepic, será gobernador de Nayarit, elegido de manera nada limpia ni transparente, pero sin elementos probatorios como para aplicar las leyes (leyes que de por sí están llenas de agujeros y ambigüedades)...
Esperemos que la paz y el trabajo regresen a Nayarit.
Pienso que si los ciudadanos concientemente nos organizamos, podemos hacer mucho mas de lo casi nada que hemos hecho.
Somos como perros de pradera que nos la pasamos nada mas cuidando nuestro entorno cercano y si vemos que algo sospechoso se acerca, llamamos a nuestra camada y nos escondemos en la madriguera, sin poner un alto a eso 'sospechoso' que nos amenaza...
Sale, adiós...
No hay comentarios:
Publicar un comentario